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viernes, diciembre 05, 2025

Hace 40 años la Guardia Civil (con gobierno del PSOE) detuvo y desapareció a Mikel Zabalza; lo “encontraron” muerto


El cuerpo de Mikel Zabalza (tenía 33 años) fue encontrado en el río Bidasoa 20 días después de su detención


Tal día como hoy, pero de 1985, la Guardia Civil detuvo a Mikel Zabalza. Sí, era 26 de noviembre del mencionado año (hace 40) cuando Zabalza fue detenido en el mismo operativo que se llevó al cuartel de Intxaurrondo (Donostia, Gipuzkoa) a otras personas, también detenidas. Estas fueron sus dos hermanos, su pareja Idoia Aierbe, su primo Manuel Bizkai e Ion Arretxe, de Rentería. Los dos hermanos fueron puestos en libertad, pero los otros cuatro detenidos fueron conducidos al siniestro cuartel.

Hoy es el día que, cuatro décadas después, los hechos siguen sin resolverse oficialmente y el gobierno español mantiene en secreto la información sobre el caso. Varios representantes políticos han solicitado al gobierno que desclasifique los archivos relacionados con el caso, pero no parece que este el Ejecutivo tenga intenciones de hacerlo. Y es que cuando sucedió todo aquello gobernaba el PSOE, con Felipe González como presidente y José Barrionuevo como ministro del Interior. Este último, como recordarán, fue posteriormente condenado por su relación con los GAL (el Tribunal Constitucional confirmó que tanto José Barrionuevo como Rafael Vera impulsaron y financiaron las acciones de los GAL, un grupo de mercenarios costeados con dinero público que asesinó a 27 personas). Las mentiras que la portavocía del Gobierno esgrimió para salir del paso ante la desaparición de Zabalza fueron mayúsculas.

Los detenidos aquel día afirmaron haber sido brutalmente torturados por la Guardia Civil en Intxaurrondo.  Aierbe pudo ver con una bolsa en la cabeza a Zabalza, y uno de sus primos oyó los gritos del joven.

El cuerpo de Mikel Zabalza (tenía 33 años) fue encontrado en el río Bidasoa 20 días después de su detención.

Declaracion del presidente del partido Comunista de venezuela

Sector promaduro




Cuba: Una nación sitiada, no fallida. Respuesta a The Economist

Publicado por  | 1 de diciembre de 2025 |  | 0


 Cada pocos años, The Economist resucita un guion familiar: Cuba se derrumba; Cuba implosiona; Cuba debe "cambiar drásticamente", invariablemente en dirección al neoliberalismo y la tutela estadounidense. Su artículo del 18 de noviembre de 2025, rebosante de compasión artificial y desprecio bien ensayado, repite este coro trillado. Con indignación moral, enumera los precios de los huevos y el arroz, invoca el espectro de la crisis humanitaria y declara, una vez más, que Cuba se encamina hacia el desastre.

Pero lo que The Economist se niega a confrontar, y con lo que cualquier análisis honesto debe partir, es el hecho central de la vida cubana: Cuba no está fracasando. Cuba está siendo estrangulada. Una nación sitiada no es lo mismo que una nación en colapso.

Ignorar el bloqueo estadounidense —hoy en día la guerra económica más larga y más punitiva de la historia moderna— no es sólo intelectualmente deshonesto: es propaganda disfrazada de periodismo.

El desfile de precios del artículo —huevos, frijoles, arroz— no son datos económicos neutrales, sino la instrumentalización de la escasez. Son las consecuencias de una estrategia deliberada de Estados Unidos, explícitamente articulada en un memorando de 1960, ahora desclasificado, de Lester Mallory, entonces subsecretario de Estado adjunto para Asuntos del Hemisferio Occidental:

“Se deben emplear todos los medios posibles… para debilitar la vida económica de Cuba… para provocar hambre, desesperación y el derrocamiento del gobierno”.

Ignorar el bloqueo estadounidense —hoy en día la guerra económica más larga y más punitiva de la historia moderna— no es sólo intelectualmente deshonesto: es propaganda disfrazada de periodismo.

El desfile de precios del artículo —huevos, frijoles, arroz— no son datos económicos neutrales, sino la instrumentalización de la escasez. Son las consecuencias de una estrategia deliberada de Estados Unidos, explícitamente articulada en un memorando de 1960, ahora desclasificado, de Lester Mallory, entonces subsecretario de Estado adjunto para Asuntos del Hemisferio Occidental:

“Se deben emplear todos los medios posibles… para debilitar la vida económica de Cuba… para provocar hambre, desesperación y el derrocamiento del gobierno”.

Esto no es una conjetura. Es una política.

En este entorno, cada paso en falso de las autoridades cubanas —errores que ocurren en todas las naciones, incluidas aquellas que se proclaman "altamente desarrolladas"— se amplifica y se instrumentaliza deliberadamente. El bloqueo económico está diseñado para dificultar extraordinariamente la gobernabilidad en Cuba, obligando al Estado a funcionar en un contexto de escasez implacable, opciones limitadas y una mayor vulnerabilidad. Cualquier falla que surja en estas condiciones no indica el fracaso del socialismo; más bien, revela los efectos previstos de la estrategia imperial estadounidense: generar frustración, erosionar la confianza y cultivar una percepción de incompetencia gubernamental. Esta percepción artificial se ve amplificada por los ecosistemas mediáticos y las plataformas digitales financiados por Estados Unidos, cuyo objetivo es sembrar confusión, cinismo y desconfianza en la sociedad cubana.

Durante 65 años, Washington se ha propuesto precisamente eso: paralizar la economía cubana, privarla de recursos, aislarla de las finanzas globales, bloquear alimentos, combustible, medicamentos e inversiones, y castigar a cualquier país o empresa que se atreva a colaborar con ella. Esta no es una guerra metafórica; es una guerra estructural, económica y psicológica diseñada para generar la escasez que The Economist ahora reporta como si fuera un fenómeno natural.

Omitir el bloqueo en cualquier discusión sobre las penurias cubanas es como describir los síntomas de un paciente ocultando el hecho de que alguien lo está asfixiando con una almohada.

Incluso bajo este prolongado asedio, Cuba ha logrado resultados sociales que los estados capitalistas ricos —aquellos más ansiosos por sermonear al mundo— han fracasado sistemáticamente. La isla ofrece atención médica universal, educación gratuita desde preescolar hasta el doctorado, y ha alcanzado una de las tasas de alfabetización más altas del mundo. Su esperanza de vida rivaliza con la de Estados Unidos, a pesar de gastar solo una fracción per cápita en atención médica. Y a pesar de sus dificultades, Cuba ha demostrado un nivel de solidaridad médica internacional sin igual en ninguna otra nación del mundo.

Según The Economist , esto es un “fracaso”.

Mientras tanto, en Estados Unidos —el autoproclamado modelo mundial de éxito— 40 millones de personas viven en la pobreza, cientos de miles duermen en la calle, decenas de millones carecen de atención médica y los niños pasan hambre en un país que desperdicia miles de millones de dólares en alimentos. En el Reino Unido, la austeridad se ha convertido en una doctrina, el Servicio Nacional de Salud (NHS) está siendo desmantelado y los bancos de alimentos son ahora un elemento permanente de la vida pública.

¿Quién es entonces el Estado fallido?

¿Cuba, que a pesar de sufrir el equivalente económico de un huracán cada día durante seis décadas, todavía insiste en que la dignidad es un derecho humano?

¿O los Estados capitalistas que abandonan a sus pobres, criminalizan a sus marginados y devoran su propio tejido social?

La Revolución Cubana no finge que todo está bien: una victoria de la ética sobre el cinismo. No oculta sus problemas. No busca victorias fáciles ni adorna la realidad con ilusiones reconfortantes. Este es el fundamento ético del socialismo cubano, un fundamento ético cimentado en el inmortal mandato de Amílcar Cabral:

Las declaraciones del presidente Miguel Díaz-Canel a principios de este año ejemplifican esta honestidad revolucionaria: defendiendo el lema del revolucionario africano Amílcar Cabral: “No mientas, no cantes victorias fáciles”. Ante el agravamiento de las desigualdades, las distorsiones económicas y las fricciones sociales del país, declaró:

La Revolución no oculta sus problemas. Los afronta con ética y justicia social, incluso en circunstancias extremas.

En un mundo donde los líderes de los países ricos patologizan la pobreza y culpan a los pobres de su sufrimiento, el liderazgo cubano dice algo completamente diferente y mucho más humano. Como declaró Díaz-Canel:

“Éstos son nuestros problemas: nuestras personas sin hogar, nuestras comunidades vulnerables, nuestras desigualdades sociales”.

En esa simple palabra, nuestro, reside todo el abismo moral que separa al socialismo cubano de la crueldad capitalista.

Toda nación que se ha atrevido a romper con el control imperial ha sido brutalmente castigada: Haití después de 1804, los movimientos anticoloniales en África y Asia, y las innumerables revoluciones latinoamericanas. Esta es la realidad histórica y global: el largo historial del imperio de sabotear la liberación; Cuba no es la excepción.

El incesante ataque estadounidense contra Cuba ha adoptado diversas formas: militar, económica, encubierta y psicológica. Ha incluido invasiones, intentos de asesinato, guerra biológica, ataques terroristas, sabotaje económico y una guerra de información sostenida, todos diseñados para desestabilizar la isla y socavar su soberanía. Más recientemente, esta campaña se ha extendido a la intervención directa en la moneda y los mecanismos de precios de Cuba, una táctica recién revelada que expone aún más la magnitud y persistencia de los esfuerzos de Washington por debilitar a la Revolución Cubana por cualquier medio.

The Economist no menciona nada de esto. En cambio, culpa a la víctima por las heridas infligidas por el agresor.

A pesar de una presión sin precedentes, Cuba no ha abandonado a su pueblo. De hecho, su socialismo está bajo asedio y aún persiste. Ha lanzado más de treinta programas sociales específicos para abordar la vulnerabilidad y la desigualdad, incluso con la escasez de recursos. Interactúa con los manifestantes no con policías antidisturbios y gases lacrimógenos, como se hace en Estados Unidos, Francia y el Reino Unido, sino con diálogo y explicaciones.

Donde los estados capitalistas reniegan de sus pobres, Cuba los reclama. Donde los estados capitalistas criminalizan la desesperación, Cuba busca soluciones. Donde los estados capitalistas privatizan el sufrimiento, Cuba socializa el cuidado.

Si The Economist estuviera realmente preocupado por las penurias humanas, sus reportajes más urgentes no provendrían de La Habana, sino de Los Ángeles, de Londres, de las favelas creadas por el neoliberalismo, de Gaza, donde las bombas apoyadas por Occidente arrasan barrios enteros, de Haití, destrozado por décadas de intervención occidental. La verdadera crisis es la crisis global del capitalismo y el imperialismo, no de una Cuba asediada.

Pero las narrativas imperiales siempre invierten la realidad.

Cuba, una pequeña isla que lucha por respirar bajo asedio, es retratada como un desastre, mientras que las naciones ricas que generan desigualdad global, guerra y destrucción ecológica son presentadas como modelos.

Cuba se enfrenta a verdaderas dificultades; ningún observador honesto lo niega. Pero las dificultades impuestas por un asedio externo no son lo mismo que un fracaso sistémico. La supervivencia de la Revolución, su compromiso con la ética y su fidelidad a la justicia social no son signos de decadencia. Son signos de dignidad.

Reconstruir su economía, reparar su tejido social, cumplir sus compromisos con la salud, la educación y la solidaridad, todo ello frente al imperio más poderoso de la historia, eso no es un fracaso.

Es un logro revolucionario. La lucha de Cuba no es un colapso, es una resistencia.

Así que cuando The Economist proclama que Cuba es una nación “encaminada al desastre”, nos dice mucho menos sobre Cuba que sobre la visión del mundo de aquellos que no pueden imaginar una sociedad organizada en torno a la justicia y no al lucro.

La verdadera pregunta no es si Cuba está fracasando.

Las verdaderas preguntas son: ¿Por qué Cuba sigue en pie? ¿Por qué Cuba se niega a rendirse?

¿Por qué Cuba continúa encarnando valores que el mundo capitalista abandonó hace mucho tiempo?

Y quizás lo más importante:

Si Cuba es realmente un Estado fallido, ¿por qué Estados Unidos debe gastar montañas incalculables de dólares cada año para tratar de hacerla fracasar?

Un estado fallido se derrumba por sí solo. Un estado asediado sobrevive a pesar de quienes desean destruirlo.

Cuba es esto último. Y eso es precisamente lo que The Economist no puede tolerar ni perdonar.

 

Isaac Saney es especialista en Estudios Afroamericanos y Cuba en la Universidad de Dalhousie y coordinador del programa de Estudios de la Diáspora Negra y Africana. Es autor de varios libros, entre ellos, «Cuba, África y el fin del apartheid: El regreso de los niños de África» .

FUENTE: Resumen Latinoamericano – Inglés

FOTO: 'Por Cuba, crearemos juntos' – La Habana, 1 de mayo de 2025.   foto: Bill Hackwell

CHINA ya es el principal acreedor del mundo capitalista


China, el mayor acreedor del mundo, ha redirigido sus préstamos hacia países ricos y tecnologías sensibles. Ningún país ha atraído tanto crédito chino como Estados Unidos desde el cambio de siglo, con 21.000 millones de dólares.

Los bancos públicos chinos han otorgado 2,2 billones de dólares en préstamos y subvenciones en todo el mundo desde 2000, según un amplio estudio realizado por AidData, un laboratorio de investigación de la Universidad William & Mary de Londres, que movilizó a más de 140 analistas durante tres años (1).

“El tamaño total de la cartera china es de dos a cuatro veces mayor que las estimaciones publicadas anteriormente”, señala Bradley Parks, director de la investigación. Eso convierte a China en el mayor acreedor del mundo, “una posición que nadie puede permitirse distanciar ni alterar”, afirma Brooke Escobar, coautora del informe.

Los préstamos chinos no van dirigidos a los países en desarrollo. La mayoría están orientados a países de altos ingresos. Entre 2000 y 2023 los bancos públicos chinos otorgaron 943.000 millones de dólares en préstamos a 72 países de altos ingresos. Solo los préstamos otorgados en el marco de la Nueva Ruta de la Seda representan alrededor del 20 por cien del total. Pekín ha centrado progresivamente sus esfuerzos en los países ricos, especialmente después de 2015 y del plan estratégico “Hecho en China 2025”.

“No todos estos préstamos responden necesariamente a un gran plan geopolítico”, explica Parks. Sin embargo, muchos préstamos chinos han financiado la construcción de infraestructuras esenciales o han permitido la adquisición de empresas tecnológicas estadounidenses por parte de empresas chinas.

Estados Unidos está a a cabeza de los deudores

Más de 200 000 millones de dólares en préstamos han llegado a Estados Unidos, más que a cualquier otro país del mundo. “Es un descubrimiento extraordinario, dado que Estados Unidos ha pasado la mayor parte de la última década advirtiendo a otros países sobre los peligros de una exposición significativa a la deuda china y acusando a China de practicar la diplomacia de la trampa de la deuda”, afirma Parks.

Los préstamos se han utilizado para impulsar el flujo de caja de numerosas empresas estadounidenses, como Amazon, Tesla, Ford y Boeing. Por ejemplo, el Banco Industrial y Comercial de China (ICBC) también contribuyó con 107 millones de dólares a un préstamo otorgado a The Walt Disney Company en 2020. El dinero público chino es particularmente abundante en proyectos de infraestructura de gas natural licuado (GNL) en Texas y Luisiana, pero también en gasoductos, centros de datos en Virginia y los aeropuertos de Los Ángeles y Nueva York.

“Una gran parte de los préstamos otorgados a países ricos se centra en infraestructuras críticas, minerales críticos y la adquisición de activos de alta tecnología, como empresas de semiconductores”, explica Brad Parks.

Entre las economías avanzadas, aquellas con mercados de capital más abiertos, flexibles y bien gobernados han sido históricamente las más propensas a absorber la mayor parte del reciclaje del excedente de ahorro de China, y esto se refiere principalmente a Estados Unidos, Reino Unido, Canadá y Australia.

Las deudas de los países europeos hacia China

La Unión Europea también se beneficia de los préstamos públicos chinos: 161.000 millones de dólares para 1.800 proyectos desde el año 2000. El mayor beneficiario es Alemania, aunque Reino Unido ocupa el primero lugar entre los países europeos beneficiados por los préstamos chinos: 60.000 millones de dólares).

Una parte del dinero ha ayudado a los fabricantes chinos a adquirir tecnologías clave, citando el ejemplo de Imagination, una empresa de diseño de semiconductores adquirida en 2017 por un fondo de inversión (Canyon Bridge Fund), entonces con sede en California, pero propiedad de entidades públicas chinas (2).

Portugal también se ha visto especialmente favorecido por los préstamos públicos chinos (11.600 millones de euros, más que Países Bajos). Los bancos financiaron, en particular, a EDP, el operador de la red de transmisión eléctrica del país, privatizado en 2011 en medio de una crisis presupuestaria y cuyo mayor accionista es ahora una empresa pública china (China Three Gorges).

El gobierno portugués busca activamente la colaboración con China. Según datos del Banco de Portugal, la inversión directa china en Portugal aumentó un 9,3 por cien en 2024, alcanzando la cifra récord de 3.960 millones de euros, lo que representa un incremento de 4,5 veces en diez años.

(1) https://www.aiddata.org/blog/chinas-massive-overseas-lending-portfolio-shifts-course
(2) https://www.bbc.com/news/articles/cvgmy5d7k84o

mpr21

SIRIA. Las movilizaciones contra el gobierno golpista avalado por occidente no cesan


Continúan las protestas pacíficas en diferentes zonas de la provincia de Latakia, donde numerosos residentes se congregan en las rotondas de Al-Azhari y Al-Emarah. Estas protestas se consideran las más numerosas organizadas por la comunidad alauita desde la caída del régimen de Al-Asad.

Según fuentes del SOHR, cientos de civiles se congregaron en las rotondas de Al-Azhari, Al-Zera’a y Al-Thawrah en Latakia, así como en la de Al-Emarah en la de Jableh, ondeando banderas sirias y coreando consignas de rechazo a la situación actual. Los manifestantes también exigieron el fin de la injusticia, el cese de los asesinatos y la liberación de los detenidos.

El creciente número de manifestantes refleja la creciente indignación pública en zonas de la costa siria.

Fuentes fiables del SOHR han informado de que un gran número de tropas de las fuerzas de seguridad general se han desplegado en la zona de las rotondas de Al-Azhari, Al-Zera’a y Al-Thawrah y la plaza Al-Hamam en Latakia, donde bloquearon carreteras principales como el puente Jableh y la circunvalación, intentando rodear a los manifestantes.

Las fuerzas de seguridad también abrieron fuego para dispersar a los manifestantes, además de bloquear algunos callejones habitados por civiles alauitas, junto con un fuerte despliegue de fuerzas de seguridad.

Mientras tanto, los manifestantes levantaron carteles con la palabra “dignidad” escrita en ellos, mientras coreaban consignas que pedían cambio y reforma.

Además, la plaza Al-Zahraa en la ciudad de Homs experimentó una tensión alarmante, donde las fuerzas de seguridad arrestaron a varios manifestantes pacíficos que participaban en la protesta sentada, además de golpear a los manifestantes arrestados a la vista de los manifestantes y los transeúntes.

Esto coincide con una considerable represión por parte de las fuerzas de seguridad que utilizaron gases lacrimógenos y violencia extrema para dispersar a los manifestantes.

Además, miembros de las fuerzas de seguridad general abrieron fuego indiscriminadamente contra los manifestantes y atropellaron a otros, lo que provocó un caos y pánico considerables en la plaza Al-Zahraa.


observatoiro DDHH

martes, diciembre 02, 2025

Recurren a la injerencia,porque no pueden ganar limpiamente "


 Con la injerencia de Donald Trump y su perdón a JOH, el bipartidismo desesperado impone un golpe electoral contra Rixi. Pero se equivocan de historia.


Xiomara mantiene más del 55% de apoyo por su buen gobierno; Honduras la respeta y el mundo la reconoce. Y LIBRE presenta a una candidata intachable, honesta, sensible, capaz, con carácter firme y una campaña profundamente democrática, basada en una propuesta económica que libera al pueblo y rompe los privilegios de las élites.

Por eso recurren a la injerencia: porque no pueden ganar limpiamente.


La maniobra es burda: una descarada, amenazante, injusta e infame intervención extranjera para torcer la voluntad popular y frenar a Rixi.

Pero cometen el mismo error de siempre: subestimar al pueblo hondureño a Rixi y nuestra capacidad de lucha. 


Señor Donald Trump, a nosotros no nos intimida, hemos resistido golpes de Estado, fraudes monumentales, asesinatos políticos y persecución.

Si sobrevivimos a la narco dictadura, ¿cree usted que nos va a doblar un tuit suyo?


Puede llamarnos comunistas, socialistas, insurgentes, lo que quiera. Somos hondureños libres, y luchamos por la autodeterminación de los pueblos y por una patria digna, justa e independiente.

Ni Washington ni la oligarquía pueden decidir por nosotros. 


Señor Donal Trump, los que luchamos por la libertad estamos de pie somos patriotas y nadie se rinde.

Rixi Moncada denuncia fraude electoral y no se rinde en Honduras

 La candidata presidencial Rixi Moncada reafirma su lucha, asegura que los comicios no están perdidos y critica la injerencia imperial del presidente Donald Trump.

rixi moncada 1

Moncada declaró que mantendrá sus posiciones y no se rendirá. Aseguró que estará siempre del lado del pueblo, con sus valores firmes en la defensa de la patria libre. Foto: @PartidoLibre


1 de diciembre de 2025 Hora: 23:52

es ES 

Rixi Moncadacandidata presidencial de LIBRE, denunció la noche del lunes desde Tegucigalpa, Honduras, fraude electoral e injerencia de Donald Trumpasegurando que los comicios no están perdidos y que no se rinde.

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Rixi Moncada llama a monitorear escrutinio hasta resultados finales

Moncada señaló que el bipartidismo hondureño «impuso su trama electoral» a través de veintiséis audios que revelaron la adulteración del sistema de transmisión de resultados preliminares y de la biometría. A esta situación, la candidata sumó la «injerencia extranjera imperial directa» del presidente estadounidense Donald Trump.

Por su parte el Partido Libre no acepta resultados, exige revisión de actas que no contaron con sistema biométrico. Llama a lucha pacífica.

La líder de LIBRE detalló que Trump, a pocas horas de las elecciones, anunció el «perdón absoluto» al narcotraficante Juan Orlando Hernándezsentenciado por Estados Unidos como co-conspirador principal en la organización de un cartel que traficó más de 400 toneladas de droga. En un «acto sin precedentes», Trump también la condenó y amenazó directamente, afirmando que «la gente inteligente de Honduras la rechazaría» y que él «no podía colaborar con Moncada y los comunistas». Este pronunciamiento, según Moncada, fue entendido por el pueblo como una coerción directa al voto.

Frente a este escenario, Moncada declaró que mantendrá sus posiciones y no se rendirá. Aseguró que estará siempre del lado del pueblo, con sus valores firmes en la defensa de la patria libre y en los principios de la no injerencia, la soberanía popular, la independencia y la autodeterminación de los pueblos. La candidata reafirmó que su propuesta de democratización económica, así como la defensa de lo público y los bienes comunes, «continúa vigente».

La candidata de LIBRE subrayó la importancia de la justicia social, la gratuidad y universalidad de la educación y la salud, y la lucha por el derecho a la verdad y la transparencia. La líder también reiteró su combate contra la corrupción público-privada y contra la impunidad de los veinticinco grupos económicos y las diez familias que, según afirmó, oprimen a la nación con sus monopolios.

Manipulación de actas y votos irregulares

Moncada detalló que una de las «trampas» consistió en la eliminación de la validación de las actas contra los lectores biométricos, una medida aprobada por el Consejo Nacional Electoral (CNE) la noche anterior a los comicios. Esta aprobación, según la candidata, «habilita la suma de actas infladas», especialmente en el nivel presidencial.

La candidata explicó que las actas «sin biométrico» tienen un promedio de 217 votos cada una. Hasta el momento, se han registrado 2.859 actas sin validación biométrica, lo que representa el 25.35 por ciento del total.

Moncada presentó cifras específicas sobre estas actas irregulares:

  • El Partido Nacional acumula 1.588 actas sin biométrico, que suman 326.285 votos.
  • El Partido Liberal registra 1.041 actas sin biométrico, con 217.193 votos.
  • El Partido Libre, en contraste, cuenta con apenas 204 actas sin biométrico.

En total, el bipartidismo, compuesto por el Partido Nacional y el Partido Liberal, suma 2.629 actas sin biometría, lo que implica 543.478 votos publicados como válidos sin el registro de huella correspondiente. Moncada denunció que estas actas «tienen más votos de los que debería», con casos extremos de hasta 100 votos adicionales.

Rechazo a candidatos y llamado a la resistencia

Moncada afirmó que no reconocerá a ninguno de los candidatos de la «oligarquía«, a quienes considera «lo mismo» por proteger a quienes «no pagan impuestos y se han adueñado del 80 por ciento de la riqueza nacional».

La candidata anunció que su partido exigirá la revisión de estas actas y hará uso de todos los recursos legales durante el plazo de 30 días establecido para el escrutinio general definitivo. El objetivo es que se «respete estrictamente la voluntad popular expresada en las urnas».