Comunicado de la Plataforma de Sevilla contra la guerra sobre el intento de golpe de estado en Venezuela

Sevilla a 25 de enero de 2019

    Los sucesivos gobiernos bolivarianos de Venezuela están, desde el principio, en el punto de mira de la agresión por parte de la “comunidad internacional”, eufemismo que se encubre a Estados Unidos y a sus aliados para la legitimación de guerras de rapiña y la desarticulación política de naciones enteras (Afganistán, Iraq, Libia, Siria…). La autoproclamación de Juan Guaidó como presidente de Venezuela, alguien a quien nadie elegió, y su inmediato reconocimiento por Estados Unidos es el último episodio en la estrategia de acoso y derribo del orden constitucional y el estado de derecho en Venezuela. Otros gobiernos subalternos al de los EE.UU., como los de Chile, Colombia o Brasil se alinearon de inmediato con la diplomacia estadounidense y su histórica tradición de organizar y apadrinar golpes de estado e invasiones militares en América Latina.

    La Plataforma de Sevilla contra la guerra condena la estrategia de los grandes medios de comunicación y de los gobiernos occidentales que promueven permanentemente un escenario de violencia en Venezuela para derrocar al gobierno legítimo por vías extraconstitucionales, violando el derecho internacional, el principio de no injerencia y de respeto de la soberanía nacional, toda vez que el respaldo demostrado por la Fuerza Armada Nacional Bolivariana al gobierno sólo deja como ùnica esperanza de consolidar los intentos de golpes de estado la organización de una invasión militar extranjera. Denunciamos esta lógica imperialista y neocolonial que bajo la cobertura de “intervenciones humanitarias” viene llevando la guerra a naciones enteras, perpetrando matanzas y sembrando la destrucción y el caos. Defendemos la legitimidad democrática y el derecho del gobierno de Venezuela a defenderse y aplaudimos la solidaridad mostrada por tantos gobiernos del mundo con el presidente Maduro.

    La plataforma de Sevilla contra la guerra exige a los gobiernos de España y de Andalucía que se alineen con el respeto a la legalidad internacional, contra las políticas golpistas y el saqueo de recursos, como estamos viendo en Libia, en Mali, en Iraq y en tantas naciones previamente ocupadas militarmente por la OTAN y los ejércitos occidentales. Andalucía debe ser siempre un ejemplo moral como promotora de una cultura de paz y de valores democráticos, contra las guerras neocoloniales y por la defensa del derecho internacional y del respeto a la soberanía de pueblos y naciones.