Jose Antonio Egido
Los cambios que se están produciendo en China afectan al conjunto de los valores y de las tradiciones del país de una manera radical. Respecto al ocio por ejemplo la aparición de bares, discotecas e incluso de establecimientos de comida rápida a la yanki es un fenómeno nuevo que tiene a penas 6 años. Respecto al desarrollo de las universidades os diré que este inmenso campus lleno de grandes edificios modernos en el que estoy es muy reciente, de los últimos 4 años.
No parece que hay una vuelta a la religión y el pueblo chino sigue siendo ateo en la parte oriental del país. En la provincia occidental de Xinjiang la oleada integrista que siguió tras la toma del poder en Afganistán por las bandas integristas apoyadas por los norteamericanos y la caída de la URSS en las repúblicas centroasiáticas, ha producido el impulso de un Islam conservador y políticamente anticomunista, separatista y terrorista que parece ha podido ser neutralizado por las autoridades. Para las masas han mayoritarias lo que parece que hay es una vuelta a las tradiciones mas seculares.
Por ejemplo, los campesinos han recuperado la costumbre de marcar el usufructo de su tierra erigiendo placas en honor de los difuntos. La TV alienta el recuerdo de las épocas feudales con telenovelas llenas de guerreros, emperadores que viajan en palanquines de largas y venerables barbas y escenas de artes marciales. Otras "tradiciones" provienen de la historia negra de la vieja China atrasada y feudal como el secuestro y tráfico de mujeres y niños, el viejo machismo que concedía a la mujer un rol de sumisa ama de cada,...
Los jóvenes exhiben una modernidad "con características chinas". Les gustan las marcas conocidas en ropas aunque los productos sean piratas. También ropas de calidad y conforme a su gusto aunque no tenga marcas. Les gustan los bailes tradicionales y las artes marciales chinas pero también la música disco y las músicas de varias partes del mundo.
Es cierto que la época heroica en la que masas enormes de jóvenes estaban dispuestos a hacer grandes sacrificios en función del hermoso slogan maoísta de "Servir al pueblo" parece que queda atrás. Millones de jóvenes fueron a educar a las campesinos, varios millones fueron a vivir y trabajar con ellos, varios millones mas fueron a combatir contra los imperialistas en la guerra de Corea a comienzos de los 50. Hoy el gobierno solicita voluntarios para trabajar como maestros entre los campesinos o como personal de salud en las regiones atrasadas del Oeste pero pocos responden al llamamiento. De 14 mil vacantes en los sectores de salud y educación en dichas regiones sólo se han cubierto 6 mil según la Agencia de Noticias Xinhua. Los jóvenes con formación universitaria prefieren encontrar empleos bien pagados en empresas en zonas desarrolladas o viajar al extranjero para proseguir estudios o conocer mundo. Su sueño es poder tener los sueldos increíbles que tienen los empresarios privados. Mientras el PC reconocen que el sueldo medio anual de cada campesina y campesino es de mil yuanes hay dueños de empresas medianas en las zonas desarrolladas que pueden ganar QUINIENTOS MIL yuanes AL MES.
Pero se equivocaría quien pensase que los jóvenes chinos son unos atontados y babeantes adoradores del American Way of Life. De eso nada. Son patriotas, aman a su país, rechazan la brutalidad del imperialismo norteamericano, tienen una buena educación, son solidarios, amables y tienen un alto sentido de lo colectivo. Son disciplinados y laboriosos. Están dispuestos para el trabajo colectivo como participar en las tareas con pico y pala de limpiar la calle de hielo y nieve, organizar eventos musicales, participar en tareas de voluntariado social que guardan alguna relación con la tradición maoísta del trabajo voluntario. Son curiosos y están abiertos al mundo. Estudian la historia de EE.UU., la filosofía marxista, el Islam y las lenguas extranjeras empezando por el inglés. Creo que muchos tienen alguna pequeña envidia de las grandes movilizaciones en contra de la guerra criminal contra Irak que se produjeron en todo el mundo en el 2003 y que en China el poder entendió conveniente no organizar ni autorizar.
Hay un repliegue hacia la búsqueda del enriquecimiento y del interés personal y, por ejemplo, en el campo ha desaparecido el trabajo voluntario de los campesinos en tareas de construcción y mantenimiento de la infraestructura agrícola que produjo muchas carreteras, canales, diques y otras obras. Antes de la reforma agraria de 1978 los campesinos trabajaban gratis cerca de 30 días al año. Hoy 3 días o ninguno. El resultado es que, según se dice, parte de esa infraestructura ha sido desmantelada o ha caído en desuso.
La modernidad en China del teléfono móvil, del ordenador portátil de última generación, del DVD pirata con los últimos éxitos de la cinematografía mundial, de la ropa de marca, de los rascacielos, de la pasión por los estudios de ciencias empresariales convive y se roza con humildes artesanos que arreglan zapatos o cosen botones en sus puestitos de calle con un frío que pela, con vendedores ambulantes de boniatos calientes, de calcetines o de riquísimas frutas escarchadas curtidos por el viento polar, con los motocarros para transportar pasajeros, con ancianos doblados por el peso de unos bultos subidos a un carrito que empujan con sus manos, con carromatos llenos de carbón tirados por un mulo... La palabra mágica es "desarrollo", lo desarrollado, es decir los edificios modernos, los medios de transporte nuevos, los grandes hoteles, las empresas de tecnología punta,...es lo bueno. Lo "no desarrollado" es lo malo.
En Changchun a 5 de diciembre de 2003.
Los cambios que se están produciendo en China afectan al conjunto de los valores y de las tradiciones del país de una manera radical. Respecto al ocio por ejemplo la aparición de bares, discotecas e incluso de establecimientos de comida rápida a la yanki es un fenómeno nuevo que tiene a penas 6 años. Respecto al desarrollo de las universidades os diré que este inmenso campus lleno de grandes edificios modernos en el que estoy es muy reciente, de los últimos 4 años.
No parece que hay una vuelta a la religión y el pueblo chino sigue siendo ateo en la parte oriental del país. En la provincia occidental de Xinjiang la oleada integrista que siguió tras la toma del poder en Afganistán por las bandas integristas apoyadas por los norteamericanos y la caída de la URSS en las repúblicas centroasiáticas, ha producido el impulso de un Islam conservador y políticamente anticomunista, separatista y terrorista que parece ha podido ser neutralizado por las autoridades. Para las masas han mayoritarias lo que parece que hay es una vuelta a las tradiciones mas seculares.Por ejemplo, los campesinos han recuperado la costumbre de marcar el usufructo de su tierra erigiendo placas en honor de los difuntos. La TV alienta el recuerdo de las épocas feudales con telenovelas llenas de guerreros, emperadores que viajan en palanquines de largas y venerables barbas y escenas de artes marciales. Otras "tradiciones" provienen de la historia negra de la vieja China atrasada y feudal como el secuestro y tráfico de mujeres y niños, el viejo machismo que concedía a la mujer un rol de sumisa ama de cada,...
Los jóvenes exhiben una modernidad "con características chinas". Les gustan las marcas conocidas en ropas aunque los productos sean piratas. También ropas de calidad y conforme a su gusto aunque no tenga marcas. Les gustan los bailes tradicionales y las artes marciales chinas pero también la música disco y las músicas de varias partes del mundo.
Es cierto que la época heroica en la que masas enormes de jóvenes estaban dispuestos a hacer grandes sacrificios en función del hermoso slogan maoísta de "Servir al pueblo" parece que queda atrás. Millones de jóvenes fueron a educar a las campesinos, varios millones fueron a vivir y trabajar con ellos, varios millones mas fueron a combatir contra los imperialistas en la guerra de Corea a comienzos de los 50. Hoy el gobierno solicita voluntarios para trabajar como maestros entre los campesinos o como personal de salud en las regiones atrasadas del Oeste pero pocos responden al llamamiento. De 14 mil vacantes en los sectores de salud y educación en dichas regiones sólo se han cubierto 6 mil según la Agencia de Noticias Xinhua. Los jóvenes con formación universitaria prefieren encontrar empleos bien pagados en empresas en zonas desarrolladas o viajar al extranjero para proseguir estudios o conocer mundo. Su sueño es poder tener los sueldos increíbles que tienen los empresarios privados. Mientras el PC reconocen que el sueldo medio anual de cada campesina y campesino es de mil yuanes hay dueños de empresas medianas en las zonas desarrolladas que pueden ganar QUINIENTOS MIL yuanes AL MES.
Pero se equivocaría quien pensase que los jóvenes chinos son unos atontados y babeantes adoradores del American Way of Life. De eso nada. Son patriotas, aman a su país, rechazan la brutalidad del imperialismo norteamericano, tienen una buena educación, son solidarios, amables y tienen un alto sentido de lo colectivo. Son disciplinados y laboriosos. Están dispuestos para el trabajo colectivo como participar en las tareas con pico y pala de limpiar la calle de hielo y nieve, organizar eventos musicales, participar en tareas de voluntariado social que guardan alguna relación con la tradición maoísta del trabajo voluntario. Son curiosos y están abiertos al mundo. Estudian la historia de EE.UU., la filosofía marxista, el Islam y las lenguas extranjeras empezando por el inglés. Creo que muchos tienen alguna pequeña envidia de las grandes movilizaciones en contra de la guerra criminal contra Irak que se produjeron en todo el mundo en el 2003 y que en China el poder entendió conveniente no organizar ni autorizar.
Hay un repliegue hacia la búsqueda del enriquecimiento y del interés personal y, por ejemplo, en el campo ha desaparecido el trabajo voluntario de los campesinos en tareas de construcción y mantenimiento de la infraestructura agrícola que produjo muchas carreteras, canales, diques y otras obras. Antes de la reforma agraria de 1978 los campesinos trabajaban gratis cerca de 30 días al año. Hoy 3 días o ninguno. El resultado es que, según se dice, parte de esa infraestructura ha sido desmantelada o ha caído en desuso.
La modernidad en China del teléfono móvil, del ordenador portátil de última generación, del DVD pirata con los últimos éxitos de la cinematografía mundial, de la ropa de marca, de los rascacielos, de la pasión por los estudios de ciencias empresariales convive y se roza con humildes artesanos que arreglan zapatos o cosen botones en sus puestitos de calle con un frío que pela, con vendedores ambulantes de boniatos calientes, de calcetines o de riquísimas frutas escarchadas curtidos por el viento polar, con los motocarros para transportar pasajeros, con ancianos doblados por el peso de unos bultos subidos a un carrito que empujan con sus manos, con carromatos llenos de carbón tirados por un mulo... La palabra mágica es "desarrollo", lo desarrollado, es decir los edificios modernos, los medios de transporte nuevos, los grandes hoteles, las empresas de tecnología punta,...es lo bueno. Lo "no desarrollado" es lo malo.
En Changchun a 5 de diciembre de 2003.
No hay comentarios :
Publicar un comentario