Moscu Sevillano
Los mediocres resultados electorales y sindicales tendría repercusiones internas, el consenso impuesto por la dirección carrillistas se iría agrietando poco a poco. A esto ayudo bastante la actitud vacilant
e y confusa del PCE en política exterior, sobre todo de cara a las relaciones con los países socialistas: la condena de la intervención soviética Afganistán, pero sin solidarizarse con Afganistán, o la solidaridad con la revueltas de trabajadoras en Polonia pero sin apoyar a sindicato solidaridad, creaba desasosiego en dos sectores importantes del partido pero antagónicos: eurocomunistas mas sinceros como el de los mas cercanos a los postulados soviéticos.
En julio de 1979 el secretario general del PSUC, Antoni Gutiérrez exponía las discrepancias que tenía los comunistas catalanes respecto a la política seguida desde la dirección del partido. Criticaba la política seguida de pactos con la burguesía representada por la UCD y el consenso constitucional y defendía la autonomía estratégica de su organización (autodeterminación, vía catalana al socialismo).
Luego en el Mundo Obrero publicaba una entrevista con Carrillo titulada.”Un Partido eurocomunista con disciplina común”, en el cual insistía de la necesidad de reforzar el aparato burocrático con mas militantes profesionalizados.Hacia elogios al “trabajo oscuros de los militante humildes, despreciando a los intelectuales ya que “la política se desenvuelve ya otros cauces”. Evidentemente dichos planteamientos evidenciaba una estrategia para el control absoluto del partido sometido a las directrices eurocomunista.
El PSUC celebro su congreso en 1981 a el se presentaba la organización divididas en 3 grandes tendencias: los pro soviéticos (entre los que se encontraban quien fuera después secretario general del PCPE y dirigente sindical como Joan Ramos, dirigentes sindicales como Alfred Clemente,o cuadros como Joseph Serradell, “Román”, Pere Ardiaca) que defendían los postulados clásicos del marxi
smo leninismo.
los leninistas caracterizado como de centro, poco numeroso, su nombre venia de haber defendido los postulados del leninismo en el IX Congresos del PCE, tenían una relación ambigua con la URSS, era acérrimo enemigos de la Pacto de la Moncloa y anticarrillista(entre los que se encontraba dirigentes sindicales López Bulla, Antonio, y el actual secretario general del PCE Francisco Frutos o intelectuales y profesionales Rafael Ribo, Manuel Vázquez Montalbán o Andréu Claret).
Los eurocomunistas mas conocidos como “Banderas Blancas”, apodo utilizado porque la mayoría provienen de la organización Bandera Roja(a quienes apoyan en su absorción por el partido comunista el antiguo dirigente Fernando Claudin), estaban dirigidos por Jordi Sole Tura y Jordi Borja, tenían influencia en ambientes universitarios y en las organizaciones vecinales del área metropolitana Barcelonesa.
El secretario general de los comunistas catalanes propuso la integración de las tendencias, sin que manipulara a favor del eurocomunismo y sin que interfiera la labor fraccional de las tres corrientes internas. El sector pro soviético controlaría con Sabadell la secretaria de organización, con la cual tendría la total libertad para ganarse el apoyo de las bases trabajadoras.
Pero realmente el resultado del congreso no logro la integración de los sectores, se mantenía la concepción de la vía democrática al socialismo pero eliminando el termino eurocomunista. En política internacional se aprobaron enmiendas que moderaban bastante las criticas a los países socialistas europeos, exigían la supresión de las bases norteamericanas en España, rechazaban la entraba en la Comunidad Económica Europea y en la OTAN. También criticaban los Pactos de la Moncloa.
El nuevo Comité Central estaba mayoritariamente compuesto por eurocomunista y leninistas, pero al negarse a ser reelegido López Raimundo y Antoni Gutiérrez, provoco la alianza leninistas-pro so
viéticos. La presidencia fue ocupada por Pere Ardiaca y la secretaria por Francisco Frutos.
Mientras se seguían los enfrentamientos entre las diversas tendencias, la militancia abandonaba paulatinamente el partido ya que si en 1977 tenían 40.000 hasta en 1981 donde la cifra bajaría a 15.000 militantes.
Carrillo se posición de alguna forma para debilitar al PSUC, ora apoyaban tácitamente a los pro soviéticos para provocar que los “banderas blancas” y los leninistas le pidieran ayuda con tal de frenar a los marxistas-leninistas, con lo cual se convirtió en el arbitro de la situación de cara a mantener el control de la totalidad de la organización.
Durante el periodo congresual se dedicaba a hacer gestos destinados a dar alas a los prosovieticas:efusivos abrazos a uno de los lideres pro soviéticos Sarradel a quien invito a visitar a Corea del Norte, o por ejemplo eligiendo que la delegación del PCE al congreso de los comunistas catalanes fuera compuesta por Ignacio Gallego(1º secretario Gral. del PCPE) Y Armando López Salinas.El carrillismo consiguió su objetivo con lo cual banderas blancas y leninistas respondieron a dicha provocación, con lo cual consiguió el PSUC se convirtiera en una organización debilitada y obediente además de minoritaria
En el V Congreso el análisis de la transición se cambia por un debate sobre la referencia eurocomunista que es ratificada en el informe político y eliminada en las tesis programáticas. López Raimundo y Gutiérrez Díaz no se presentan a la reelección. Son elegidos Francisco Frutos como secretario general y Pere Ardiaca Presidente del partido. Este último será destituido meses después por el Comité Central.
Tras el fallido intento de golpe de estado, se abriría nuevas escisiones en el PCE, por un lado, se encontraba las salidas de profesionales, intelectuales Mohedano, Tamames, algunos se integrarían en el PSOE; por otro la salida de sectores marxistas-leninistas en donde se encontraba integrado como fue el caso de Francisco García Salve procesado por el “proceso 1001”.
El X congreso del PCE tendría nuevas tensiones como se verían zonas como Andalucía, Madrid y Cataluña, en Andalucía el tanden Fernando Soto(secretario general del PCA)-Eduardo Saborido(secretario Gral. de comisiones obreras)-Francisco Acosta(secretario de organización) dimitirían abriendo paso a los carrillistas Felipe Alcaraz y Antonio Romero, venciendo la oposición del sector renovador donde se encontraba Julio Anguita.El sector pro soviético no tenia presencia ya que se integraba en el sector carrillista, cual tenia una política izquierdista y moderadamente pro soviética.
e y confusa del PCE en política exterior, sobre todo de cara a las relaciones con los países socialistas: la condena de la intervención soviética Afganistán, pero sin solidarizarse con Afganistán, o la solidaridad con la revueltas de trabajadoras en Polonia pero sin apoyar a sindicato solidaridad, creaba desasosiego en dos sectores importantes del partido pero antagónicos: eurocomunistas mas sinceros como el de los mas cercanos a los postulados soviéticos.En julio de 1979 el secretario general del PSUC, Antoni Gutiérrez exponía las discrepancias que tenía los comunistas catalanes respecto a la política seguida desde la dirección del partido. Criticaba la política seguida de pactos con la burguesía representada por la UCD y el consenso constitucional y defendía la autonomía estratégica de su organización (autodeterminación, vía catalana al socialismo).
Luego en el Mundo Obrero publicaba una entrevista con Carrillo titulada.”Un Partido eurocomunista con disciplina común”, en el cual insistía de la necesidad de reforzar el aparato burocrático con mas militantes profesionalizados.Hacia elogios al “trabajo oscuros de los militante humildes, despreciando a los intelectuales ya que “la política se desenvuelve ya otros cauces”. Evidentemente dichos planteamientos evidenciaba una estrategia para el control absoluto del partido sometido a las directrices eurocomunista.
El PSUC celebro su congreso en 1981 a el se presentaba la organización divididas en 3 grandes tendencias: los pro soviéticos (entre los que se encontraban quien fuera después secretario general del PCPE y dirigente sindical como Joan Ramos, dirigentes sindicales como Alfred Clemente,o cuadros como Joseph Serradell, “Román”, Pere Ardiaca) que defendían los postulados clásicos del marxi
smo leninismo.los leninistas caracterizado como de centro, poco numeroso, su nombre venia de haber defendido los postulados del leninismo en el IX Congresos del PCE, tenían una relación ambigua con la URSS, era acérrimo enemigos de la Pacto de la Moncloa y anticarrillista(entre los que se encontraba dirigentes sindicales López Bulla, Antonio, y el actual secretario general del PCE Francisco Frutos o intelectuales y profesionales Rafael Ribo, Manuel Vázquez Montalbán o Andréu Claret).
Los eurocomunistas mas conocidos como “Banderas Blancas”, apodo utilizado porque la mayoría provienen de la organización Bandera Roja(a quienes apoyan en su absorción por el partido comunista el antiguo dirigente Fernando Claudin), estaban dirigidos por Jordi Sole Tura y Jordi Borja, tenían influencia en ambientes universitarios y en las organizaciones vecinales del área metropolitana Barcelonesa.
El secretario general de los comunistas catalanes propuso la integración de las tendencias, sin que manipulara a favor del eurocomunismo y sin que interfiera la labor fraccional de las tres corrientes internas. El sector pro soviético controlaría con Sabadell la secretaria de organización, con la cual tendría la total libertad para ganarse el apoyo de las bases trabajadoras.
Pero realmente el resultado del congreso no logro la integración de los sectores, se mantenía la concepción de la vía democrática al socialismo pero eliminando el termino eurocomunista. En política internacional se aprobaron enmiendas que moderaban bastante las criticas a los países socialistas europeos, exigían la supresión de las bases norteamericanas en España, rechazaban la entraba en la Comunidad Económica Europea y en la OTAN. También criticaban los Pactos de la Moncloa.
El nuevo Comité Central estaba mayoritariamente compuesto por eurocomunista y leninistas, pero al negarse a ser reelegido López Raimundo y Antoni Gutiérrez, provoco la alianza leninistas-pro so
viéticos. La presidencia fue ocupada por Pere Ardiaca y la secretaria por Francisco Frutos.Mientras se seguían los enfrentamientos entre las diversas tendencias, la militancia abandonaba paulatinamente el partido ya que si en 1977 tenían 40.000 hasta en 1981 donde la cifra bajaría a 15.000 militantes.
Carrillo se posición de alguna forma para debilitar al PSUC, ora apoyaban tácitamente a los pro soviéticos para provocar que los “banderas blancas” y los leninistas le pidieran ayuda con tal de frenar a los marxistas-leninistas, con lo cual se convirtió en el arbitro de la situación de cara a mantener el control de la totalidad de la organización.
Durante el periodo congresual se dedicaba a hacer gestos destinados a dar alas a los prosovieticas:efusivos abrazos a uno de los lideres pro soviéticos Sarradel a quien invito a visitar a Corea del Norte, o por ejemplo eligiendo que la delegación del PCE al congreso de los comunistas catalanes fuera compuesta por Ignacio Gallego(1º secretario Gral. del PCPE) Y Armando López Salinas.El carrillismo consiguió su objetivo con lo cual banderas blancas y leninistas respondieron a dicha provocación, con lo cual consiguió el PSUC se convirtiera en una organización debilitada y obediente además de minoritaria
En el V Congreso el análisis de la transición se cambia por un debate sobre la referencia eurocomunista que es ratificada en el informe político y eliminada en las tesis programáticas. López Raimundo y Gutiérrez Díaz no se presentan a la reelección. Son elegidos Francisco Frutos como secretario general y Pere Ardiaca Presidente del partido. Este último será destituido meses después por el Comité Central.
Tras el fallido intento de golpe de estado, se abriría nuevas escisiones en el PCE, por un lado, se encontraba las salidas de profesionales, intelectuales Mohedano, Tamames, algunos se integrarían en el PSOE; por otro la salida de sectores marxistas-leninistas en donde se encontraba integrado como fue el caso de Francisco García Salve procesado por el “proceso 1001”.
El X congreso del PCE tendría nuevas tensiones como se verían zonas como Andalucía, Madrid y Cataluña, en Andalucía el tanden Fernando Soto(secretario general del PCA)-Eduardo Saborido(secretario Gral. de comisiones obreras)-Francisco Acosta(secretario de organización) dimitirían abriendo paso a los carrillistas Felipe Alcaraz y Antonio Romero, venciendo la oposición del sector renovador donde se encontraba Julio Anguita.El sector pro soviético no tenia presencia ya que se integraba en el sector carrillista, cual tenia una política izquierdista y moderadamente pro soviética.
Finalmente vendria el desastre en las elecciones generales de 1982
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