El golpe de Lister contra el anarquismo aragonés (1): causas y preparación (mayo-agosto 1937)
Los “Fets de Maig” terminaron con “el feudo anarquista” que había sido Cataluña. El fracaso de la expedición de guardias de asalto, a Monroyo y Valderrobres, puso todo el poder del Aragón republicano en manos de los comités locales, coordinados por el Consejo de Caspe. Una “taifa anarquista”, desligada de la Generalidad catalana y del Gobierno central. La masacre de la derecha y las violentas disputas entre colectivistas e individualistas en casi todos los pueblos del Bajo Aragón, obligaron al Gobierno de Negrín a tomar una decisión drástica.
Columna Durruti
UNIDOS CONTRA LA DERECHA
Tras el golpe de los militares, en julio de 1936, todos los partidos, que habían conformado el Frente Popular jalearon y alentaron la violencia de los anarquistas contra el clero y los hombres de derechas. Alentaron también el saqueo de sus casas y propiedades. Tuvieron especial avidez por las joyas y piezas de orfebrería, en metales preciosos, de iglesias, ermitas, rectorías y casas particulares.
Colectividades-Aragón
El núcleo inicial de los bienes colectivizados estuvo formado por las escasas propiedades de los anarquistas que, voluntariamente, fundaron colectividades en todos los pueblos del Bajo Aragón. Se amplió con la incautación de fincas, casas y pertenencias de los derechistas huidos y fusilados, y con los bienes de los detenidos y presos en las cárceles de Caspe y Alcañiz. Así como de los confinados en el Campo de Concentración de Valmuel y los forzados a cavar trincheras en la zona de Belchite. Los pocos derechistas que quedaron en los pueblos fueron integrados en las colectividades, bajo la amenaza de correr la misma suerte de sus correligionarios muertos o presos.
Corderos expropiados
Muchos esperaban el reparto de los bienes confiscados a los “fascistas”. Los problemas surgieron cuando, en lugar de recibir bienes procedentes del reparto, se les exigió la entrega de sus propios bienes a la colectividad, y su incorporación a la misma como trabajadores. Estos hombres de la izquierda, no anarquista, generalmente afiliados a UGT, se negaron a entregar sus fincas y a incorporarse al trabajo y reparto colectivos. Éstos fueron los llamados individualistas.
DISPUTAS ENTRE COLECTIVISTAS E INDIVIDUALISTAS
En mis tres artículos anteriores, bajo el epígrafe de “Rojos contra rojos”, he narrado tres episodios puntuales de la pugna, que anarquistas y republicanos de izquierda sostuvieron, desde el alzamiento en el Bajo Aragón. Esta pugna se acentuó a partir del fracasado intento de los guardias de asalto en Monroyo y Valderrobres. Esos tres episodios son sólo la punta del iceberg del enfrentamiento generalizado, entre colectivistas e individualistas, en casi todos los pueblos del Bajo Aragón.
Cartel de la Guerra Civil
Esta pugna de tintes violentos, obligó a cuarenta izquierdistas de Fuentespalda y dieciocho de Fórnoles a un “exilio” de más tres meses en Morella, fuera del alcance de los comités anarquistas de Aragón. Otros fueron fusilados, como los alcaldes izquierdistas de Mirambel y Mosqueruela. También he narrado en otro artículo el asesinato del comunista Ejarque, presidente del comité de Mas de las Matas.
Otros prefirieron incorporarse como milicianos a los frentes de batalla donde, paradójicamente, corrían menos peligro que en su propio pueblo. Mencionaré tres testimonios representativos:
1- José Blanc era un pintor-decorador izquierdista, nacido en Calaceite, que residía en Alcañiz. Siguiendo la corriente se incorporó a una colectividad de blanqueadores y pintores formada en Alcañiz, de la que llegó a ser presidente, cuyo funcionamiento resultó inviable. Así lo cuenta el propio Blanc en sus memorias:
Columna Maciá-Companys
“En Alcañiz sólo mandaba la FAI y sus milicianos armados. Mi situación, dado mi carácter independiente, se hacía cada vez más incómoda. Las perspectivas de que se arreglase aquello no eran nada halagüeñas, sino todo lo contrario. Mi situación, tanto en lo político como en lo social, se hacía cada vez más comprometida…urgía hallar una solución. Pero ¿Cuál? ¿Dónde estaba?”-. La presencia en Alcañiz de la columna Maciá- Companys, formada por milicianos de Esquerra Republicana de Catalunya, supuso un alivio temporal a la presión ejercida por los anarquistas. Pero pronto -. se marcharían al frente y quedaríamos otra vez a merced de la FAI, que volvería con más ímpetu revanchista a imponernos su tiranía-. Era cuestión de curarse en salud antes no fuera tarde y adopté una resolución: alistarme en una fuerza netamente republicana y disciplinada…De momento esto causó sorpresa, pero cinco de los muchachos más jóvenes siguieron mi ejemplo y nos fuimos a las oficinas militares a alistarnos.”
2- El 11 de marzo del 37 el comité anarquista de Oliete denunciaba, ante la Comisaría de Investigación de Caspe a uno de los fugitivos enrolado en las columnas:
3- El alcalde republicano de Muniesa, el 11 de septiembre de 1937, poco después del golpe de Lister, denunciaba ante el Gobernador General de Aragón la conducta de los anarquistas, a quienes calificaba de indeseables:
En las delegaciones de Orden Público y en el Juzgado de Alcañiz hay constancia de numerosas denuncias presentadas por individualistas arrollados por la presión anarquista.
Producción colectiva
LA SOLUCIÓN MILITAR DE INDALECIO PRIETO
Indalecio Prieto
La caída del gobierno de Largo Caballero en mayo de 1.937 provocada, en parte, por la fracasada intervención de los guardias de asalto en Monroyo y Valderrobres, puso al comunista Negrín a la cabeza del nuevo gobierno y al socialista Indalecio Prieto en el Ministerio de Defensa.
El descrédito internacional de España, por la salvaje y continuada actuación de los anarquistas, había impedido que países democráticos como Francia, Inglaterra y los EE. UU. rompiesen su neutralidad formal en la guerra de España y ayudasen al gobierno republicano. La URSS condicionó su ingente ayuda a la eliminación del poder residual que los anarquistas ya sólo conservaban en Aragón. El ministro Prieto elaboró un plan para resolver el problema.
Enrique Líster, fue convocado el 5 de agosto de 1937 a Valencia por Vicente Rojo, el Jefe del Estado Mayor Central, y le comunicó que el ministro Prieto quería hablar con él. El propio Líster lo cuenta así en sus memorias:
Enrique Líster
“Había en la antesala del ministro unas veinticinco o treinta personas, pero al llegar nosotros el ordenanza entró en el despacho, del que salió inmediatamente el ministro. Sonriente, me dio la mano al mismo tiempo que le decía a Rojo que podía retirarse. Luego, echándome el brazo por encima del hombro, me acompañó hasta un sillón de su despacho. Él se sentó en otro, frente a mí. Yo estaba más que mosca de tanta amabilidad y mis sospechas se confirmaron en cuanto me expuso el objeto de la llamada.
Me explicó que el Gobierno había decidido disolver el Consejo de Aragón, pero temía que los anarquistas se resistiesen a acatar la orden y como, además de las propias fuerzas policíacas del Consejo, tenían tres Divisiones del Ejército, le había propuesto al Consejo de ministros -y éste lo había aceptado- enviar allí una fuerza militar capaz de asegurar el cumplimiento de la decisión gubernamental. Que la fuerza designada había sido la 11 División, porque su combatividad y mi energía y ecuanimidad eran garantía de que las órdenes del Gobierno serían cumplidas. Me dijo que no habría ninguna orden por escrito de la misión que recibía, ni luego habría órdenes ni parte sobre el cumplimiento de la misma; que se trataba de un secreto entre el Gobierno y yo. Que liquidase sin contemplaciones ni trámites burocráticos ni legalistas a todo el que creyese conveniente, que detrás de mí tenía al Gobierno en pleno.”
Esta decisión era la sentencia definitiva del anarquismo aragonés. El principio del fin del sueño igualitario.
Negrín, Prieto y Rojo
BIBLIOGRAFIA
BEL, Pedro J. “La casa del Sabinet. Historia de una familia de derechas”. Barcelona: Autoedición, 2007.
BLANC SANMARTÍ, José. “Toda una vida. Memorias de un calaceitano”. Alcañiz: Centro de Estudios Bajoaragoneses, 1997.
CARRASQUER, Félix. “Las colectividades de Aragón. Un vivir autogestionado, promesa de futuro”. Laia, Barcelona 1986.
CASANOVA NUEZ, Ester. “La violencia política en la retaguardia republicana de Teruel durante la guerra civil”. Teruel: Instituto de Estudios Turolenses, 2007
LÍSTER, Enrique. “Nuestra Guerra. Memorias de un luchador”: Ediciones Silente. Zaragoza, 2007.
SOUCHY BAUER, Agustín. “Entre los campesinos de Aragón. El comunismo libertario en las comarcas liberadas”. Barcelona: Tusquets Editor, 1977
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